Me empujo un trago doble de aguardiente, se muy bien que el anís me perjudica bastante, pero que le vamos a hacer, el aire también me fastidia en ocasiones y no por ello pienso dejar de respirar, eso seria darle gusto demasiado fácil a la anciana tía con su verruga en la cara que jura que va a ir a mi funeral. ¡Las guevas! Aun hago caras cuando baja por la garganta, a lo que uno que otro varón de pelo en pecho llamarían flojera yo llamo gusto fino. Mierda, Estiércol, boñiga, caca, que más da. Hoy me robe un libro de la publica, leo una y otra vez la Soledad Mexicana un poema de un viejo escritor que supo empujarse todo y que gracias al buen wisky que tomo después de sus largas noches de vinos baratos enfermo y murió, por lo menos eso me gusta imaginarme, yo no tengo suficiente dinero para una buena botella de wisky, mejor me empujo otro guaro. Extrañó a mi chica Otoño pero tal vez esta noche lo mejor es no verme con ella, odia mi tufo, yo no podría odiar ni su carroña, estaría bien embriagarme con algún compañero pero ahora no pueden salir del cementerio y los que sobrevivieron a la tempestad esta lavando platos en algún bar para pagar la cuenta, cuenta que yo no pague por salir corriendo tras el rastro de un perro vagabundo que me recordó a mi Tango, extrañó mucho a mi can, aunque era mal bebedor le encantaba Piano Man y eso ya era suficiente. Me gustaría invitarle un trago a Sid Barret y acompañarlo con mi armónica en una nueva versión de The piper at the gates of down, pero estoy seguro de que me haría tragar mi armónica y no se tomaría el trabajo de ocultar mi torpeza extrema. Me gustaría mucho preguntarle cosas a Leon Bloy y aunque no entendiera un carajo me reiría locamente al ver su rostro sin dios y con los pelos saliéndole de la nariz, me gustaría saber donde carajos puse la caja de fósforos ahora que llevo demasiado haciendo equilibrio con un cigarrillo en mi boca seca. En fin mejor me dejo caer.
IRREFLEXIONES DE UN BASTARDO DE LA GLOBALIZACION (FRAGMENTO)
JAVIER RABIARTE
POR LA SENDA DEL SIN.ISMO
